EUROPA
PRESS
18 enero
2023
Alertan
del peligro de usar secadores de esmalte de uñas de luz ultravioleta, con 20
minutos pones en riesgo tu ADN
Solo una sesión de 20 minutos conduce a
entre un 20 y un 30 por ciento de muerte celular
Los dispositivos de secado de esmalte de uñas de luz
ultravioleta que se utilizan para fijar las manicuras en gel pueden representar
un problema de salud pública mayor de lo que se pensaba, ya que investigadores
de la Universidad de California en San Diego (EEUU) han descubierto que su uso
genera muerte celular y mutaciones en el ADN que pueden causar cáncer.
El uso de estos dispositivos es muy común en los salones de
manicura y, generalmente, usan un espectro particular de luz ultravioleta que
va de 340 a 395nm para secar los productores químicos que se usan en las
manicuras de gel.
Para hacerse una idea del riesgo, lo investigadores comparan
el riesgo con las máquinas bronceadoras que tienen potentes filtros que emiten
radiaciones ultravioletas con un espectro que puede ser incluso menor que la
usada en los secadores de uñas, aproximadamente de 280 a 400 nm. En el caso del
uso de las cabinas bronceadoras de rayos UVA está suficientemente demostrado,
de manera científicamente concluyente que son
cancerígenas, pero el espectro utilizado en los secadores de uñas no se ha
estudiado aún.
"Si observa la forma en que se presentan estos
dispositivos, se comercializan como seguros, sin nada de qué preocuparse. Pero
hasta donde sabemos, nadie ha estudiado estos dispositivos y cómo afectan a las
células humanas a nivel molecular y celular hasta ahora", ha advertido Ludmil Alexandrov, profesor de
bioingeniería y medicina celular y molecular en UC San Diego, y autor del
estudio, que ha sido publicado este martes en 'Nature
Communications'.
Usando tres líneas celulares diferentes, queratinocitos de
piel humana adulta, fibroblastos de prepucio humano y fibroblastos embrionarios
de ratón, los investigadores encontraron que el uso de estos dispositivos
emisores de rayos ultravioleta durante solo una sesión de 20 minutos conduce a
entre un 20 y un 30 por ciento de muerte celular, mientras que tres
exposiciones consecutivas de 20 minutos causaron la muerte entre el 65 y el 70
por ciento de las células expuestas.
La exposición a la luz ultravioleta también causó daños
mitocondriales y en el ADN de las células restantes y provocó mutaciones con
patrones que se pueden observar en el cáncer de piel en humanos.
"Vimos varias cosas: primero, vimos que el ADN se daña.
También vimos que parte del daño en el ADN no se repara con el tiempo y conduce
a mutaciones después de cada exposición al secador de esmalte de uñas
ultravioleta. Por último, vimos que la exposición puede causar disfunción
mitocondrial, lo que también puede provocar mutaciones adicionales", ha
afirmado la investigadora.
De hecho, durante el estudio examinaron a pacientes con
cánceres de piel y vieron "exactamente" los mismos patrones de
mutaciones en estos pacientes que se observaron en las células irradiadas.
Los investigadores advierten que, si bien los resultados
muestran los efectos nocivos del uso repetido de estos dispositivos en las
células humanas, se necesitaría un estudio epidemiológico a largo plazo antes
de afirmar de manera concluyente que el uso de estas máquinas aumenta el riesgo
de cáncer de piel.
No obstante, los resultados del estudio fueron claros: el
uso crónico de estas máquinas secadoras de esmalte de uñas está dañando las
células humanas.
¿Vale la pena el riesgo por la recompensa?
Estos datos en células humanas, junto con una serie de
informes previos de cánceres en personas que se hacen manicuras en gel con
mucha frecuencia, pintan una imagen de un procedimiento puramente cosmético que
es más arriesgado de lo que se creía anteriormente.
Pero ¿hacerse una manicura en gel una vez al año es
realmente motivo de preocupación, o solo deberían preocuparse aquellos que lo
hacen con mucha frecuencia? Para contestar a esta pregunta se necesitan más
estudios para cuantificar cualquier aumento en el riesgo de cáncer y con qué frecuencia
de uso, pero con muchas alternativas a este procedimiento cosmético, el riesgo
puede no valer la pena para algunos consumidores.
"Nuestros resultados experimentales y la evidencia
previa sugieren fuertemente que la radiación emitida por los secadores de
esmalte de uñas ultravioleta puede causar cáncer de mano y que los secadores de
esmalte de uñas ultravioleta, similares a las camas de bronceado, pueden
aumentar el riesgo de cáncer de piel de aparición temprana", han señalado.
Sin embargo, se justifican futuros estudios epidemiológicos
a gran escala para cuantificar con precisión el riesgo de cáncer de piel de la
mano en personas que usan regularmente secadores de esmalte de uñas UV.
"Es probable que dichos estudios tarden al menos una década en completarse
y luego informar al público en general", manifiesta el estudio.
Aunque otros productos de consumo usan luz ultravioleta en
el mismo espectro, incluida la herramienta utilizada para curar empastes
dentales y algunos tratamientos de depilación, los investigadores señalan que
la regularidad de uso, además de la naturaleza completamente cosmética de los
secadores de uñas, los distingue.
Por el momento, Maria Zhivagui,
becaria postdoctoral en el Laboratorio Alexandrov y
primera autora del estudio, quien afirma que era fán
de este tipo de manicuras, a renunciado a hacerse las uñas con esta técnica
después de ver los resultados.
"Una vez que vi el efecto de la radiación emitida por
el dispositivo de secado de esmalte en gel sobre la muerte celular y que en
realidad muta las células incluso después de una sola sesión de 20 minutos, me
sorprendió. Encontré que era muy alarmante y decidí dejar de usarlo",
afirma.
Estudiando su efecto en las células humanas
La idea de estudiar estos dispositivos en particular se le
ocurrió a Alexandrov en el consultorio de un
dentista. Mientras esperaba a que lo atendieran, leyó un artículo de una
revista sobre una joven concursante de un concurso de belleza a la que se le
diagnosticó una forma rara de cáncer de piel en el dedo.
"Pensé que era extraño, así que comenzamos a
investigarlo y notamos una serie de informes en revistas médicas que decían que
las personas que se hacen manicuras en gel con mucha frecuencia, como los
concursantes de concursos y los esteticistas, informan casos de cánceres muy
raros en los dedos, lo que sugiere que esto puede ser algo que causa este tipo
de cáncer", afirma Alexandrov.
Y lo que vieron fue que no había comprensión molecular de lo
que estos dispositivos estaban haciendo a las células humanas. Para realizar el
estudio, Zhivagui expuso los tres tipos de células a
dos condiciones diferentes: exposición aguda y exposición crónica al
dispositivo de luz ultravioleta.
Bajo exposición aguda, se colocaron placas de Petri que
contenían uno de los tipos de células en una de estas máquinas de curado UV
durante una sesión de 20 minutos. Luego se sacaron durante una hora para
reparar o volver a su estado estable, y luego se les dio una exposición más de
20 minutos. Bajo exposición crónica, las células se colocaron debajo de la
máquina durante 20 minutos al día, durante tres días.
Observaron muerte celular, daño y mutaciones en el ADN en
ambas condiciones, con una elevación de las moléculas de especies reactivas de
oxígeno, que se sabe que causan daño y mutaciones en el ADN, y disfunción
mitocondrial en las células. El perfil genómico reveló niveles más altos de
mutaciones somáticas en las células irradiadas, con patrones de mutaciones
ubicuamente presentes en pacientes con melanoma.